Gaià

Gaià es un municipio situado al norte de la comarca del Bages, fronterizo con el Berguedà. Por su término transcurren el río Llobregat y las rieras de Merlès, de Cornet y de Gaià. El municipio de Gaià está formado por la entidad que tiene el mismo nombre y por la de Galera, situada en el margen izquierdo del Llobregat y que se despide de los visitantes que dejan el Bages para entrar en el Berguedà a través del eje del Llobregat.

Dentro del término municipal encontramos un séquito de construcciones, la mayor parte de ellas son religiosas y fueron construidas durante la Edad Media. Son ejemplo de ello el Castillo de Gaià, edificado entre los siglos IX y X siendo un símbolo de la Marca Hispánica y del que hoy únicamente se conservan los restos que se encuentran situados en la subida que hay antes de llegar a la capilla de Santa Àgata. Ésta se encuentra situada en el punto más alto de la cima que lleva el mismo nombre y está ubicada donde anteriormente se encontraba una parte de la muralla que formaba el antiguo castillo.

Continuando con los elementos religiosos encontramos la iglesia de Sant Andreu del Genescar que ha sido objeto de distintas modificaciones que han cambiado de manera considerable su aspecto inicial. Se encuentra situada al lado de la masia del Genescar. Sant Esteve de Vilamaró o del Serralet es una capilla de época románica que igual que la anterior ha sufrido diversas modificaciones. El mismo caso pasa con la capilla de Sant Jordi de Lloberes.

La iglesia de Sant Pere de Monistrol, de la Roca o de les Cigales es la misma edificación. Era un pequeño monasterio visigodo que se acabó convirtiendo en una capilla rural hasta que acabó perdiendo el techo y de la cual hoy solo se conservan las cuatro paredes.

De la época moderna tenemos otros testimonios como la iglesia de Santa Maria de Gaià con una mezcla de estilos: renacentista y barroco. También está el Comunidor de Santa Maria de Gaià, se trata de un recinto pequeño y cuadrado abierto a los cuatro vientos y que era utilizado por los monges para orar durante las tormentas y así evitar desgracias. Es importante ya que es uno de los pocos edificios de este tipo que quedan en Cataluña. No podemos olvidarnos tampoco de la Rectoría de Santa Maria de Gaià ni de la iglesia de Sant Bartomeu de la Vall de Vilamaró.

Por lo que hace referencia al entorno natural, Gaià cuenta con distintas fuentes y pinares y la Balma de les Esplugues situada cerca de la masia de la Vall de Vilamaró y que tiene unos 300m2 y de donde sale agua fresca. Durante muchos años se convirtió en refugio de bandoleros y mendigos.