Casa Batlló Barcelona

Casa Batlló es una de las obras maestras de Antoni Gaudí, Patrimonio Mundial de la UNESCO desde 2005, máximo exponente del modernismo y un icono de Barcelona. Con más de 1,5 millones de visitantes al año, Casa Batlló ofrece experiencias culturales innovadoras con un objetivo: hacer feliz a las personas a través del arte.

Su nueva visita cultural inmersiva, estrenada en 2021 y galardonada con 37 premios internacionales, constituye una propuesta museográfica pionera con numerosas innovaciones tecnológicas que amplifican la magia de Gaudí, como salas inmersivas, contenidos de Realidad Aumentada e instalaciones audiovisuales.

Además, el monumento ha intensificado su restauración desde 2018, rehabilitando espacios icónicos como la fachada principal, los vestíbulos, la terraza y los patios, invirtiendo más de 20 millones de euros en estas intervenciones.

Casa Batlló está comprometida con el desarrollo sostenible, y desde 2019 cuenta con el sello Biosphere, una certificación de sostenibilidad reconocida internacionalmente que avala las buenas prácticas relacionadas con la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU.

En este ámbito, destaca el compromiso social de Casa Batlló con la inclusión laboral de personas neurodivergentes (autismo, dispraxia, TDAH...), siendo el primer Patrimonio Mundial que cuenta con un equipo de 100 personas neurodivergentes para atender a los visitantes.

Historia de la Casa Batlló

Desde 1860, con la aprobación del Plan Cerdà, el Paseo de Gracia se convirtió en el principal eje de Barcelona. Durante el siglo XIX se consolidó como un paseo peatonal y coches de caballos, y en el siglo XX se convirtió en una avenida clave para los automóviles.

Construido inicialmente en 1877 por Emili Sala i Cortés, profesor de arquitectura de Gaudí, el edificio se encontraba en una Barcelona todavía sin luz eléctrica. En 1903, Josep Batlló i Casanovas, un destacado industrial textil, adquirió el inmueble para reformarlo.

Con total libertad creativa, Antoni Gaudí transformó el edificio entre 1904 y 1906, evitando su derribo. Renovó la fachada, redistribuyó los interiores, amplió el patio de luces y creó una obra de arte única con gran funcionalidad. La obra presenta elementos que algunos consideran precursores de las vanguardias arquitectónicas del siglo XX.

En la década de los 50, la Casa Batlló dejó de pertenecer a la familia Batlló y acogió a varias empresas. En los años 90, los actuales propietarios, la familia Bernat, restauraron íntegramente el edificio.

Fotos: Sergi Boixader