La Vall de Boí

lA vALL de Boí, naturaleza, cultura y deporte en los Pirineos

La Vall de Boí es un municipio de ocho pequeños núcleos que, gracias a su aislamiento, ha conservado casi intactos el territorio, la naturaleza y el patrimonio cultural, con una economía tradicionalmente ganadera.

Los principales atractivos son el Parque Nacional de Aigüestortes y Estany de Sant Maurici, el único parque nacional de Cataluña, el balneario de Caldes de Boí, las pistas de esquí de Boí Taüll Resort, el conjunto de iglesias románicas declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, y las nuevas propuestas de actividades en el de iglesias, el vídeo mapping y el Centro del Románico y su nueva musealización.

Outdoor Park Vall de Boí

Este nuevo espacio es una apuesta por un turismo activo y sostenible. El Outdoor Park Vall de Boí es la nueva marca que se ha creado para englobar toda la oferta deportiva que se puede realizar en la Vall de Boí.

Desde el senderismo, los circuitos de orientación, las rutas en BTT y E.Bike de forma individual o guiadas, tirolinas, escalada, vías ferratas, pesca, alpinismo, running, esquí, parapente hasta el circuito de pump truck y de skate.

Senderismo, naturaleza en estado puro

En la Vall de Boí encontrarás un valle preparado para ser descubierto a pie. Desde la riqueza natural que te ofrece el Parque Nacional de Aigüestortes hasta los caminos románicos que unen las iglesias de cada uno de sus pueblos, todos ellos muy bien señalizados.

Caminos antiguos, testigo del paso de hombres y animales durante siglos, que hoy invitan a desconectar y redescubrir un patrimonio vivo.

El nuevo Centro del Románico

El patrimonio románico de La Vall de Boí cuenta ahora con un renovado Centro del Románico en Erill la Vall, con una musealización moderna, accesible e inmersiva. Se ha incorporado una nueva experiencia virtual, que permite a los visitantes realizar un viaje en el tiempo para entender mejor cómo era la vida en la edad media y la función de las iglesias románicas.

El centro ofrece, pues, una forma innovadora y emocionante de acercarse a este legado declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO.

Parque Nacional de Aigüestortes y Estany de Sant Maurici

Cumbres que superan los 3.000 metros, ríos, cascadas, estanques y una rica biodiversidad definen este espacio protegido único en el sur de Europa. La Vall de Boí es una de las principales puertas de entrada, con dos rutas destacadas: por Aigüestortes, con un acceso tranquilo y sin dificultades, y por Cavallers, con un paisaje rocoso e impresionante. Es un sitio ideal para excursionistas, fotógrafos y amantes de la naturaleza en estado puro.

Cultura a flor de piel

Visítanos y revive las tradiciones ancestrales y formas de vida de nuestros antepasados rodeados de un entorno natural y cultural de gran valor. La fiesta de las fallas, que se celebra en sesenta y tres pueblos de los Pirineos y Pre-Pirineos (34 de Francia, 17 de Cataluña, 9 de Aragón y 3 de Andorra) ha sido declarada Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO.

La fiesta de las fallas está ligada a los ciclos agrarios y solares. Arrancar el fuego, símbolo del sol, de la montaña y bajarlo hacia el pueblo sirve para purificar los campos y bosques, purificar a la población y preservarla de los malos espíritus.

Pueblos con alma

• Barruera: el corazón administrativo del valle, con la iglesia de Sant Feliu y la ermita de Sant Salvador.
• Cóll: pequeño núcleo con la iglesia de la Asunción.
• Saraís: pueblo abandonado con la iglesia de Sant Llorenç, sólo accesible a pie.
• Cardet: colgado sobre las peñas con espectaculares vistas y la iglesia de Santa Maria.
• Durro, uno de los pueblos más bonitos de España, conserva el aspecto medieval y cuenta con la Natividad y Sant Quirc.
• Erill la Vall: sede del Centro del Románico, con Santa Eulàlia y su campanario románico.
• Boí: el pueblo tradicionalmente más importante, con el puente de Sant Martí y Sant Joan, el más antiguo del valle.
• Taüll, un pueblo con encanto otorgado por la Agencia Catalana de Turismo, el más alto de todos, con Santa Maria y Sant Climent, donde se puede disfrutar de un videomapping espectacular que recrea los frescos originales.

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