Cataluña, tierra de volcanes
Cataluña es también tierra de volcanes. El campo volcánico catalán se distribuye en tres grandes zonas volcánicas: del Empordà, de la Selva y de la Garrotxa. En esta última zona se encuentran los volcanes más modernos y con un mejor estado de conservación. Se han identificado treinta y ocho en el ámbito del Parque Natural de la Zona Volcánica de la Garrotxa, dos en el Valle de Hostoles y cinco en el Valle del Llémena.
La región volcánica de la Garrotxa es el paisaje volcánico más importante la Península Ibérica y uno de los más interesantes de Europa. Su orografía, el suelo y el clima le proporcionan una variada vegetación, a menudo exuberante, con encinares y hayedos de excepcional valor paisajístico.
El Parque Natural de la Zona Volcánica de la Garrotxa, formado por once municipios, dispone de varios itinerarios pedestres que transcurren por los lugares más interesantes del Parque Natural. La mayoría están señalizados, excepto algunos de los más largos que, si se está acostumbrado, se pueden seguir fácilmente con la ayuda del plano-guía del Parque Natural.
A los volcanes del Parque se puede subir sin especial complicación, el de Santa Margarita y el Croscat no te los puedes perder, son los más grandes y curiosos y están habilitados para ser visitados.
Si después de la visita, desea vivir una experiencia aún más completa te recomendamos que te adentres, pruebes y te sorprendas con la cocina volcánica. Una cocina cercana y contundente, nacida y cocinada en la zona, para chuparse los dedos, con platos estrella como las patatas de Olot o las judías de Santa Pau.