Bescanó

El municipio de Bescanó se encuentra en la orilla derecha del río Ter, al oeste de la comarca del Gironès. Ocupa 36 Km2 de los contrafuertes orientales de las Guilleries. Los pueblos de Bescanó, Estanyol, Montfullà y Vilanna comparten un paisaje mediterráneo de colinas boscosas.

Delimita: por el norte, el río Ter; por el sur, la cabecera del Onyar, el volcán de la Crosa y llano de la Selva; por el este, el llano de Girona; y por el Oeste, el llano de Trullàs.

El entorno rural conserva el pasado agrícola: campos fértiles en el llano, colinas del bosque espeso y alguno urbanizado. La población sobrepasa los 5.000 habitantes, mucha gente vive en Bescanó y va a trabajar al área de Girona; el pueblo crece y se desarrolla una economía industrial y de servicios, moderna y dinámica.

Historia

Las piezas arqueológicas muestran un pasado remoto, rico y diverso: asentamientos del paleolítico del monte de Rigau y la villa romana de Montfullà; poblado ibérico y campo de silos de Estanyol, castillos medievales de Bescanó; capillas y masías prerrománicas de Vilanna. Perviven topónimos íberos como Taceram (Ter) y visigóticos como la masía Wualard de Trullars. Las parroquias medievales se estructuran durante la alta edad Media sobre cuatro villas romanas: Vilanna, Montfullà, Estanyol y Bescanó.

El dominio condal se mantiene en Montfullà y Bescanó, pero los endeudamientos de los reyes hacen que los burgueses de Girona compren rentas y funden masías donde se refugiarán del hambre de 1333 y la peste negra de 1348.

El siglo XV es tiempo de derrochados. Los edificios son dañados por los terremotos de 1427. Los nuevos estados europeos presionan a Catalunya. Girona es fortificada para guardar la entrada a la península. Bescanó comparte los continuos asedios sobre la ciudad, la defensa, la destrucción y la sangría de los tributos que reclaman tanto la ciudad como los enemigos asediados.

Durante las guerras carlistas en Vilanna se producen los fusilamientos sumarísimos de carlistas (1851) que precipitaron la abolición del cuerpo de los mossos d'esquadra. Entre la segunda a tercera guerra carlista se implantan las escuelas públicas de Bescanó y Estanyol.

A finales del siglo XIX Bescanó empieza a salir del Antiguo Régimen: en 1880 se construye la carretera nacional y en 1893 el tren Girona - Olot. Grober y Bonmatí ponen puentes sobre el Ter para acceder a las fábricas textiles, símbolo del cambio y progreso socioeconómico del siglo XX.

Estalla la guerra civil, y en Bescanó y Estanyol se forman comités antifascistas que asumirán las tareas de defensa y gobierno municipal hasta conseguir el control político del ayuntamiento.

En los años 60, se desarrollan industrias cárnicas, comercios, talleres… que atraen a la inmigración de los alrededores. El pantano de Susqueda hace olvidar las trombas de agua Pliega el tren de Olot. Una guardería pública sustituye a la de la fábrica. Crece el ensanche y se edifican los primeros pisos en el barrio obrero casas nuevas.

De los 80 acá, se aprovecha el impulso económico del entorno metropolitano de Girona, que se traduce en un crecimiento urbanístico y poblacional, sostenido y sostenible, dotado de todos los servicios públicos que pueden tener y mantener.

Lugares de interés

La Torre de Bescanó

Casa fortificada, de planta cuadrada, con ventanales góticos y románicos en la planta noble. Era la residencia de los señores feudales. Durante el siglo XIX, los Benages, comerciantes y terratenientes, prosperaron, ennobeciéndose con matrimonios (marqués de Garcilán) y títulos pontificios (conde de Berenguer).

Iglesia de Sant Llorenç

La primera referencia a Bescanó menciona la iglesia, probablemente reedificada sobre una capilla prerrománica. Nave con nervaduras de arte gótico y fachada de estilo barroco (1744 – 1790). La antigua rectoría (1953) y la nueva rectoría (1704) conforman los ejes del casco antiguo.

Museo Etnológico Municipal

Exposición permanente de herramientas y objetos antiguos. En la Casa de la Volta. Visitas concertadas.

Castrum de Baschono

Herencia de Ot de Montcada, caballero trovador. Probablemente, el castillo de Bescanó (1276) sea el edificio fortificado, con patio amurallado y ventanales góticos, llamado castillo de Favars (1179 Arnaldi de Fauars y Berengarii de Fauars), posteriormente llamado castillo de Foix o de Castelló. Desde hace siglos, es una masía.

Castillo de los Castellevell

Ruinas del Puig del Castell, entre la masía Viader Vell (1288) y la masía Ferrer - Pagès o la Fàbrega (1213), que eran los alcaldes.

Molino

Molino harinero, masía y conjunto administrativo y residencial de los terratenientes feudales. En el siglo XIX, la familia Benages, condes de Berenger, reforma la masía Hospital (1603) convirtiéndola en una casa de veraneo de estilo francés. Adosada al palacete, construyen la capilla privada y cenotafio de Nuestra Señora de la Concepción. Edificio neorrománico (1879) de ladrillo, de planta octogonal con cúpula.

Fábrica Textil Gròber

Los derechos de agua del molino de Benages pasan a la fábrica de cintas y botones. El complejo industrial comienza con la construcción de la primera central hidroeléctrica, el primer puente sobre el Ter (1902). El sistema productivo, no colonial, que ocupa a cientos de trabajadoras, reconvierte y moderniza la economía y la sociedad de Bescanó, estancada en el antiguo régimen. Se construye el Cine Unión y un servicio de guardería atendido por monjas Vetlladoras.

Paso de la Barca del Llibant

La barca del molino cruzaba el Ter hace tres siglos. A principios del siglo XX, las riadas se llevan el puente de la fábrica y retornan las barcas, de remo y de cable, y los barqueros: en Roca, en Pere petit... La riada de 1940, que llega a la calle de Dalt, se lleva barcas y casas. El último barquero, en Varisto, pasó la barca hasta 1974. Al pie del embarcadero quedó el hostal del barquero.