Fiestas de fuego en Cataluña
El fuego es el elemento más importante de las fiestas tradicionales catalanas. Es un símbolo cargado de aspectos divinos, presente en cientos de celebraciones rituales y cíclicas, el sol se pone y el fuego se convierte en el protagonista que lo sustituye. Protagonista de fiestas con una atmósfera mágica y simbólica, es una mezcla de creencias paganas y religiosas, costumbres, rituales ancestrales y milenarios.
Este fuego es el protagonista de un buen número de fiestas tradicionales catalanas, como las fallas que se celebran en 17 pueblos del Pirineo catalán convertidas en fiestas colectivas y socializadoras. Otro gran ejemplo es la Patum de Berga, que tiene lugar anul·lament por Corpus y es la única bullicio del Santísimo Sacramento que se ha conservado y ha evolucionado en Cataluña desde el siglo XIV. La fiesta invita a ver un verdadero infierno rebosante de fuego en la plaza de San Pedro.
En todo el territorio encontramos otras muestras de cultura popular vinculada al fuego, hablamos de los diablos y bestiario festivo, de las verbenas que viven su punto álgido la noche de San Juan, los correfocs o los pasacalles con bestiario de fuego.