La Patum de Berga

Orígenes de la Patum

El origen de la Patum proviene de los entremeses que desfilaban en las antiguas procesiones de las fiestas de Corpus. Su objetivo era instruir a la población en las Sagradas Escrituras, pero poco a poco se fue perdiendo ese sentido, ya que la gente formaba parte de ella, más bien, por su vertiente lúdica. Y, estos entremeses, se van convirtiendo en entidades propias y fueron tomando protagonismo en las procesiones.

Tal fue así, que se terminó gestando una nueva fiesta llamada Bulla o Bullicia del Santísimo Sacramento, que era el nombre con el que era conocida, en sus inicios, la fiesta de la Patum. Con todo ello, nos situamos a mediados del siglo XIV.

La celebración de esta fiesta parece que se produjo en diferentes poblaciones de Cataluña, pero sólo Berga fue capaz de mantenerla y conservarla, a pesar de las muchas prohibiciones sufridas a lo largo de los siglos.

Las comparsas

La Patum cuenta con diferentes comparsas. Ahora os presentamos todos aquellos elementos imprescindibles para el desarrollo de la fiesta.

El Tabal: no se considera como una comparsa propiamente dicha, ya que es el heraldo de la fiesta y el instrumento inicial de la representación festiva.

Los Turcs y Caballets: cuatro turcos y cuatro caballeros cristianos representan la lucha entre la Cruz y la Media Luna que siempre acaban ganando los Caballets.

Las Maces: representan la lucha entre el Bien y el Mal, y lo hacen de la mano de los ángeles y los demonios. Originariamente formaban parte de la misma representación que los Plens.

Los Ángeles: son considerados como entidad propia, aunque siempre han estado ligados a la representación de las Mazas. Inicialmente, San Miguel era el único ángel de la comparsa, pero más tarde se incorporó un ayudante.

La Guita: es una figura con cabeza de dragón, cuello de jirafa, cuerpo de mula y cola de caballo. En los inicios de la fiesta sólo había una, la conocida como Guita Grossa, pero más tarde se incorporó la Guita Xica o Guita Boja.

L'Àliga: cuando el Águila sale a la plaza se empieza a hacer el silencio para que baile con total solemnidad ante las autoridades.

Los Nans Vells(cabezudos): son cuatro figuras con pelo largo y un sombrero de tres picos que bailan al son de músicas populares y tocan las castañuelas.

Los Gigantes: actualmente hay dos parejas de gigantes, los Nuevos y los Viejos. Representan antiguos caudillos musulmanes vencidos que bailan al son de danzas populares catalanas.

Los Nans Nuevos: se construyeron para sustituir los nans Viejos, pero fueron restaurados y han convivido durante años. Los forman dos parejas: una joven y una vieja. Su música es de las más populares de la fiesta.

Els Plens: son el elemento más espectacular de la Patum, con ellos se vive el éxtasis final de la fiesta, la plaza se convierte en el infierno con las figuras que están llenas de "fuets" (petardos), de ahí su nombre.

El Tirabol: no se considera una comparsa como tal, pero representa el punto final de la Patum. Es el momento culminante donde los Gigantes y las Guites bailan juntas con toda la multitud de la plaza para despedir la fiesta.

La Patum infantil

No sólo los mayores son partícipes de la fiesta. En Berga no se deja de lado a los niños y, aunque también asisten a la Patum "de los mayores", los niños hacen su propia Patum.

Su origen viene de las ganas de jugar a la Patum y la habilidad de los padres para construir elementos que hicieron posible jugar. Así pues, la participación se hizo cada vez mayor hasta que se llegó al punto de que se instauró su participación en la fiesta el viernes de Corpus.

La Patum infantil es símbolo de la participación de los niños en la fiesta que ya se inician en la vivencia y el sentimiento de su representación.

La Patum, Patrimonio de la Humanidad

En noviembre del año 2005, la Patum fue declarada Obra Maestra del Patrimonio Oral e Inmaterial de la Humanidad por la Unesco.

El objetivo de esta declaración es el de reconocer y proteger tradiciones y expresiones orales, artes del espectáculo, usos sociales, rituales y actos festivos, conocimientos y usos relacionados con la naturaleza y el universo y técnicas artesanales tradicionales.

La Patum y Berga

El resto del año, Berga continúa teniendo presente su fiesta. De hecho, tan pronto un visitante entra en la ciudad de Berga un enorme logo de La Patum lo recibe en forma de metal en una de sus rotondas. Igualmente, todo aquel que pasea por la calle Mayor descubre bajo sus pies una serie de losas que representan imágenes de las diferentes comparsas de la Patum. Una vez en la Plaza Sant Pere, se comenta que parece increíble que quepa tanta gente en ese espacio. Y, cuando ya se pasa por la plaza pequeña, la del hospital viejo o la del Doctor Salón basta con levantar la cabeza para disfrutar de un magnífico mosaico donde con todo detalle y color están las comparsas de la fiesta.

Y, claro, no se puede marchar de Berga sin visitar el Museo de la Patum y conocer el proyecto de la Casa de la Patum.

Pero si con todo esto no es suficiente, el Patronato de la Patum de Berga ha creado la marca Patum bajo la que se acogen, entre otros elementos, la típica barreja, galletas, vinos, cuentos, joyas, pañuelos, llaveros, fuets (embutido), figuras, bombones, etc.