Un viaje embrujado al Pirineo, Alta Ribagorça

Os proponemos un viaje a través de los cascos antiguos del Pont de Suert, Vilaller y Boí. Tres rutas que os llevarán a conocer los enredos de las brujas de los Carantos y a recurrir a las encantadoras de la Vall de Boí para resolverlo.

Los bosques, las montañas, los ríos o las piedras de las casas y masías llevan siglos modelando el paisaje de la Alta Ribagorça. La comarca goza de parajes idílicos y de gente acogedora que han forjado la identidad propia de este territorio.

Una comarca, pero, llena de leyendas, de rincones misteriosos y de lugares embrujados. A través de este juego os invitamos a conocer la Alta Ribagorça, su historia, su patrimonio y su gente de la mano de algunos de estos personajes legendarios y misteriosos: las brujas de los Carantos.

Dice la leyenda que las brujas de Vilaller vivían en los Carantos, unas rendijas de roca en el monte, muy cerca de donde los muchachos bajaban antes las fallas la noche de San Juan. Cuando llovía, las brujas sacaban la ropa sucia de dentro de las cuevas y la tendían fuera para que se limpiara. Una vez limpia y seca, las brujas se apresuraban a esconder su tesoro de nuevo dentro del agujero.

A medianoche, cuando todo el pueblo dormía, las brujas de los Carantos bajaban a la plaza de Vilaller y bailaban la Bolangera. Nunca se dejaban sorprender por nadie, y es que tan pronto como olían que alguien se acercaba para espiarlas, huían hacia sus agujeritos. Sólo un hombre del pueblo, el carpintero Xep de Veleta, las había pillado una vez bailando en la plaza.

Sin embargo, el caso es que hace pocos días, un terrible vendaval esparció toda la ropa que tenían tendida. Ahora, las brujas nos proponen ayudarlas a recuperar las diferentes prendas, que han ido quedando repartidas por diferentes lugares de los tres municipios de la comarca. Para agradecernos la ayuda, si completamos los tres itinerarios, recuperando así toda su ropa, nos darán un premio.

Los tres itinerarios:

• La villa de los puentes (El Pont de Suert).
• Un pueblo lleno de magia (Vilaller).
• El valle del fuego y las piedras (El Valle de Boí).

¿Os animáis?