Ruta por la Carena del Roc de Fraussa desde el Santuario de las Salinas

Acceso

Para llegar al Santuario de las Salinas deberemos ir primero hasta Maçanet de Cabrenys. Si venimos del sur, deberemos salir a la AP-7 Figueres Nord (salida 3) y seguir por la N-II durante 6'5 km hasta llegar al desvío hacia Darnius y Maçanet de Cabrenys (GI-503 / C -769). Seguimos por esta carretera, pasando por Darnius y la seguiremos hasta la entrada de Maçanet de Cabrenys. Justo en este punto, veremos a la derecha una calle con la indicación del Santuario de las Salinas y la urbanización Can Muntada. Seguimos un tramo por esta calle hasta llegar a una bifurcación a izquierda y derecha. Tomamos la calle de la derecha, en subida, dirección al Santuario de les Salines (señalizado). Ahora ya sólo nos faltará ir siguiendo esta pista que al cabo de unos 3-4 kilómetros deja de estar asfaltada y sigue como camino de tierra. Por lo general, es apta para cualquier turismo. Iremos subiendo suavemente haciendo varias curvas de sartén. Poco antes de llegar al santuario, evitaremos una pista cementada a la izquierda que sube directa hacia el Moixer y el Roc del Contador. Seguimos por la pista de la derecha que llanea hasta el llano delante del Santuario de las Salinas.

Recorrido

Empezamos a andar desde el Santuario de las Salinas por la pista forestal que nos ha llevado hasta aquí durante un centenar de metros. Justo en una curva, tomamos un sendero que sale a mano derecha indicado con las marcas del GR (enlace del GR-11 al GR-10) y de la Ruta de los Refugios de la Tramuntana. Nos tocará remontar una pendiente pronunciada por el sendero en medio de un bosque muy variado: iremos encontrando pino silvestre, castaños, algún fresno y algún arce… en definitiva un bosque diverso típico de las zonas montañosas del Alt Empordà

Después de superar este tramo de fuerte pendiente, el camino va a salir al Coll dels Pous (o Coll dels Pous de Neu ), donde coincidimos con una pista cementada que sale poco antes del Santuario de las Salinas y sube hasta las antenas del Moixer. Nosotros no seguiremos la pista ya que sería muy monótono y daríamos vuelta, por eso, cruzamos el Coll de Pous de Neu hacia la vertiente francesa por un paso canadiense. El nombre de este collado se toma de los tres antiguos pozos de hielo que había en el Comú de Maçanet y otro que había en el Comú de Ceret. Actualmente sólo se conservan dos.

Inmediatamente después de cruzar el paso ganadero, giramos a nuestra izquierda, dirección Oeste para empezar la subida hacia el Moixer por el hayedo. Dejamos las marcas de GR y seguimos las rayas de color amarillo y también las señales de la Ruta de los Refugios de la Tramuntana. De hecho, las marcas del GR-10 salen por un camino paralelo a pocos metros del Coll dels Pous y es por donde volveremos. Nuestro camino sube fuertemente por el hayedo por la ladera de levante de la montaña. El sendero no tiene pérdida (quizás en otoño se desdibuja un poco con la caída de hojas). Más arriba, el camino da un giro a la izquierda (marcado con señales amarillas). Si siguiéramos rectos, continuaríamos por el hayedo de la vertiente norte de la montaña y por el GR-10.

Seguimos subiendo con algo menos de pendiente por medio del hayedo, casi paralelos a la alambrada de vacas que tenemos a nuestra izquierda. Más arriba, lo cruzamos por un paso que está abierto. Poco después, se abre un prado, el Raso del Moixer que cruza el Coll del Puig de la Neu. Ante nosotros ya vemos las antenas del Moixer. Seguimos por el camino medianamente trillado y que pasa entre la retama, los helechos y otras hierbas altas. Poco después, vamos a encontrar la pista cementada que sube de abajo y la seguimos los últimos metros hasta el Moixer, protagonizado por las antenas de telecomunicaciones y por varios vértices geodésicos. También vemos una placa que nos indica que se trata del techo comarcal del Alt Empordà, aunque más adelante veremos que el Roc del Contador es unos metros más alto.

La vista desde el Moixer domina todo el Alt Empordà y el Rosellón. Se ve perfectamente el Golfo de Roses y el Cabo de Creus. También las cimas de la Alta Garrotxa: El Mont, el Puig Bassegoda y, más lejos, las antenas de Roca Corbatera. En el lado rosellonés, aparte de Perpiñán y la plana, también vemos perfectamente el Macizo del Canigó

Seguimos adelante por la cresta de la Fraussa hacia el siguiente promontorio rocoso, el Roc del Contador. Desde las antenas del Moixer tardamos menos de diez minutos por la cresta. Iremos siguiendo las marcas amarillas que lo bordean por el norte (posiblemente todavía adivinemos las antiguas marcas azules que había). Los últimos metros lo remontaremos sin marcas trepando por los mejores pasos entre los bloques de granito. La zona tiene un aire de Montseny, por el tipo de bosque y de cresta pelada con rocas de granito en varios lugares. Arriba, nos espera una pequeña cruz y una vista amplia de toda la cresta de la Fraussa.

Desgrimpamos estas rocas hasta el camino y seguimos por el camino con marcas amarillas que desciende por la esquina norte de la cresta, hasta los pies del Roc de la Fraussa o de la Frausa (incluso en algún punto veremos escrito Roc de França ) Ciertamente, se debe decir que hay cierta confusión entre esta cima y la del Contador. Precisamente en el Roc del Contador encontramos una inscripción que dice “ Roc de Frausa ”, así que es probable que encuentre algún mapa o indicación con equivocaciones. Antes de llegar al Roc de la Fraussa auténtico, pasamos un trocito por hayedo y lo alternamos con otras zonas despejadas de retama y hierba alta. Entre el Roc del Contador y el de la Fraussa tardamos unos 15 minutos. Justo a los pies del Roc de la Fraussa, vemos una inscripción en la roca.

Volvemos al camino que bordea la cresta por el norte y seguimos bajando un tramo por el camino de señales amarillas entre algunos abetos hasta encontrar el camino por donde viene el GR-10. Más adelante, regresaremos por este sendero por la esquina norte de la montaña, pero antes acabaremos de llegar hasta el Roc de la Campana.

Pasamos el Coll de Sant Martí que se abre en un claro entre el bosque y también las vistas hacia la vertiente sur. También encontramos un pequeño desvío que nos permitiría subir la roca que tenemos delante. En este caso, lo evitamos y seguimos por el camino de la umbría, por donde pasa el GR-10 y nos adentramos de nuevo en el hayedo. Mientras vamos descendiendo suavemente, encontraremos un doble desvío a la izquierda: primero con una marca de color rojo y el camino poco trillado, y después otro camino más trillado con la señal de la Ruta de los Refugios de la Tramuntana. Cogeremos el primer desvío poco fresado a la derecha e iremos siguiendo las marcas rojas hasta sobresalir del bosque y llegar a una zona de prados y arbustos. Estamos en Les Collades y ante nosotros vemos la cima redondeada del Roc de la Campana. Para llegar, podemos optar por seguir las marcas rojas (que nos puede parecer que den vuelta por el sur, ya que cruzan un trocito de hayedo), o bien seguir por la cresta sin camino trillado y trazando el mejor camino hasta llegar a la cima del Roc de la Campana. Si optamos por el camino de las marcas rojas, cruzaremos un roquedal y un pequeño tramo de hayedo y veremos una inscripción en una roca “P6”.

Desde la cima redondeada, ganamos algo más de perspectiva hacia el sector de la Alta Garrotxa, especialmente hacia el sector del Bassegoda, el Comanegra y, más lejos, incluso del Puigsacalm. El Canigó hoy nos queda escondido tras las nubes que cubren todo el Vallespir.

Es hora de volver al camino trillado del GR-10 pasando por la cresta hierbada o bien por el camino con marcas rojas que bordea un tramo por el sur. Una vez regresamos al GR-10, ya no lo dejaremos hasta el Coll dels Pous. Así pues, evitamos el camino por la cresta (por donde hemos venido) hacia el Roc de la Fraussa y el del Contador y seguimos por el sendero de la izquierda que se adentra de lleno hacia el hayedo de la vertiente norte. Justo poco después de entrar en el hayedo, tomamos un pequeño atajo para evitar fuertes curvas del GR-10. Este atajo, poco fresado, está indicado con marcas de puntos rojos y va a encontrar el GR-10 un poco más adelante. El tramo que nos ahorramos, ciertamente, son pocos metros, así que puede seguir tanto por un camino como por el otro.

Todo el itinerario por el hayedo de la vertiente norte es uno de los tramos más bonitos y recomendables de la ruta. El bosque nos recuerda a otros hayedos como los del Montseny, pero con la diferencia de encontrar bastantes árboles de grandes dimensiones...y otra diferencia importante: en estos hayedos, no nos hemos encontrado a casi nadie. Nos lo apuntamos para volver otro año en otoño, cuando los colores deben ser espectaculares.

Después de bordear toda la vertiente norte del Roc de la Fraussa, del Contador y del Moixer, poco a poco el camino va tumbando hacia levante. Veremos cómo el hayedo ya no es tan sombrío y vamos bajando progresivamente hasta el Coll dels Pous. Antes encontraremos un desvío a la derecha que iría a encontrar el camino de subida. Finalmente, bajamos hasta el Coll dels Pous donde volvemos a cruzar a la vertiente catalana.

Antes de volver a bajar al Santuario de las Salinas, subiremos hacia el otro lado del collado, para descubrir dos cumbres más: el Roc del Pou y el de las Salinas (o Puig de les Pedrisses ). Subiremos un poco entre las retamas y llegaremos a los pies del Roc del Pou. Nos desviamos un momento a la izquierda para llegar hasta la cima, desde donde vemos perfectamente casi toda la llanura del Rosellón.

Volvemos al camino y pasamos ahora un tramo poco trillado y con la hierba un poco alta. Encontramos hierba de todo tipo, helechos, algunas zarzas y otras plantas. Incluso nos encontramos con alguna genciana amarilla, una planta típica de ambientes de montaña. Durante este tramo con el camino un poco embolsado iremos encontrando marcas de puntos rojos.

Llegamos a un collado que según el ICC se llama Pas del Cavall y en este punto vemos un desvío a la derecha. Es por donde bajaremos al Santuario de las Salinas. Ahora, sin embargo, afrontaremos la última subida hasta el Puig de les Pedrisses o Roc de les Salines, por un camino más trillado y con marcas amarillas y rojas. Una vez arriba, ganamos bastante perspectiva hacia la esquina de La Jonquera, el Puig Neulós y toda la costa ampurdanesa y rosellonesa. También vemos, al otro lado, las antenas del Moixer y el hayedo de la vertiente norte.

Deshacemos el camino hasta el collado de bajada y ahora nos desviamos a nuestra izquierda por el camino que baja directo hacia el Santuario de las Salinas, indicado con marcas de color amarillo. El camino va perdiendo altura rápidamente y entra en un bosque muy diverso como en la subida: con pinos, fresnos y varios castaños. Finalmente, el pino gana protagonismo en el resto de árboles y afrontamos la última bajada hasta llegar al llano del Santuario de las Salinas. Así finalizamos esta circular por los techos del Alt Empordà.

Autoría fotografías y texto: Sergi Boixader