Descubriendo la gamba de Palamós

Palamós, el paraje natural de la gamba roja

El municipio de Palamós puede ser identificado por diversas características y aspectos pero cuando se trata de gastronomía es reconocido por la gamba roja la cual se alimenta de la fauna y flora marina que se encuentra en el fondo marino de la costa de Palamós.

Esta localidad de la Costa Brava, como la mayoría de municipios de este litoral, cuenta con una costa de características únicas formada por un fondo marino de cañones y taludes.

La gamba se sitúa en un caladero de ambiente rocoso, aguas transparentes y rico en biodiversidad a lo largo de tres millas del cabo de San Sebastián de Palafrugell.

Se podría decir que el hallazgo de la gamba roja fue posible por la vocación marinera de la villa y el arte del arrastre que se adoptó como arte de pesca. Concretamente, en 1930 pescadores procedentes del sur de Cataluña, exactamente de la Ametlla de Mar, llegaron a la costa de Palamós e introdujeron el arte del arrastre.

Con esta nueva técnica, que consiste en pescar con una red que se arrastra por el fondo marino con la ayuda de la barca, se descubrieron grandes caladeros de gambas y empezó a ser relevante como actividad propia del municipio de Palamós.

Para adentrarse más en el mundo de la pesca y conocer, pues, el pasado marinero de Palamós es recomendable la visita al Museo de la Pesca que se encuentra en el mismo municipio.

La subasta de la Gamba

En el municipio de Palamós existen 9 embarcaciones de arrastre que se dedican a la pesca de la gamba y que cuentan con la certificación de calidad. Aunque en temporada alta se puede llegar a dedicar hasta unas 35 embarcaciones.

Cabe decir que las gambas presentan dificultades a la hora de ser capturadas y cuantas más embarcaciones haya en el mar menor es la pesca de este crustáceo, evidentemente, por cada una de las barcas. Las cantidades oscilan entre 120 y 170 toneladas anuales y se pueden dividir en tres tipologías según su tamaño: grande, medio y pequeño. Ésta puede ser pescada durante todo el año pero el momento máximo de captura y pesca de las gambas se produce entre los meses de mayo y julio.

Los pescadores de Palamós comienzan a trabajar al amanecer con el fin de pescar la gamba con la técnica del arrastre. Éstos se desplazan hasta los caladeros y sueltan las redes que recogen por la tarde y descargan, posteriormente, el crustacial puerto.

Éste es el cuadro vivo de la vida diaria de los pescadores y de los puertos, el cual es un espectáculo para todo visitante sobre todo si se asiste, posteriormente, a la subasta del pescado.

La asistencia a esta actividad es una manera de entender el pasado, presente y futuro marinero de la villa de Palamós.

Chupa la cabeza y lámate los dedos

La Gamba de Palamós es el producto principal de una tradición gastronómica y un atractivo de la comarca del Baix Empordà. Además, se ha convertido en el eje vertebrador de las jornadas gastronómicas llamadas “ Chupa la cabeza y lámate los dedos ” que se celebran anualmente en el municipio de Palamós y Calonge-Sant Antoni.

Estas jornadas cuentan con el “ Menú de la gamba ” que se puede degustar en varios restaurantes de la bahía que forman parte de la asociación el plato azul a lo largo de dos meses, a menudo entre los meses de abril-mayo y junio-julio. El menú es el mismo para todos los restaurantes incluidos en esta iniciativa.

Calonge - San Antonio

El municipio de Calonge - Sant Antoni, tal y como su nombre indica, se encuentra urbanizado en dos partes diversas, Calonge y Sant Antoni de Calonge.

El primer núcleo poblacional, Calonge, es la villa originaria y Sant Antoni de Calonge corresponde al barrio marinero del pueblo que se fue formando con la desaparición de la piratería y la ubicación de las barracas de los pescadores.

Esta población vecina de Palamós disfruta de la presencia de la gamba roja, que se luce por las lonjas de pescado y por las paradas de los mercados.

La playa Es Monestri de San Antonio de Calonge enlaza el municipio de Palamós y de Calonge. Así pues, por su proximidad con Palamós a este pueblo también podrá saborear la gamba roja, principalmente en los restaurantes de la bahía de Sant Antoni.